Abstract:
La reforma del sector de inteligencia en Ecuador, como proceso emergente de elevada complejidad, tras el Ataque de Angostura (1 de marzo 2008), perpetrado por fuerzas militares colombianas en territorio ecuatoriano es un fenómeno multidimensional, de elevada sensibilidad: es más, no solo debe ser inscrito el debate de los estudios de inteligencia, sino en la reflexión discursiva, habida cuenta de que es precisamente a partir de las prácticas discursivas es desde donde se puede visibilizar la evolución de tal proceso, que sin duda, por más de 9 años no ha logrado cuajar la institucionalidad de la inteligencia de Estado, hecho que ha implicado graves consecuencias para la maniobra de gobernabilidad y la imposibilidad de contar con una inteligencia para pleno Siglo XXI.