Abstract:
El 55% de la población mundial vive en áreas urbanas y se estima que aumente a 68% para el año 2050. El sector de la construcción representa uno de los consumidores más grandes de electricidad y agua. Mientras que contribuye con una considerable huella negativa de carbono, el sector se mantiene rezagado en términos de acción climática. Frente al límite de los recursos naturales de nuestro planeta, la estrategia de economía circular sugiere potencialidades para vincular las competencias de los Gobiernos Autónomos Descentralizados (GAD) municipales en Ecuador a los sectores productivos, como contribución a la estabilidad y resiliencia del sistema ambiental global. A medida que aumenta la población, mayor se vuelve la necesidad de extraer recursos para satisfacer sus necesidades. La economía a escala global es circular en tan solo un 9% y la construcción y mantenimiento de las infraestructuras consumen alrededor de la mitad de los materiales que ingresan anualmente a la economía global. La cantidad de recursos en términos de minerales que ingresan al sector de la construcción representa el 40.84% del total de recursos utilizados. En esta investigación se considera la competencia de “regular, autorizar y controlar la explotación de materiales áridos y pétreos” de los GAD para identificar las potencialidades hacia la economía circular en relación con la industria de la construcción. A partir de indicadores numéricos relacionados al ingreso, mantenimiento y salida de desechos en la economía global, para el sector de la construcción, se valora una serie de marcos existentes para la evaluación de la circularidad, así como estrategias aplicables al sector. Se consideran las bases legales que establecen a los GAD municipales como el nivel de gobierno encargado de la competencia de áridos y pétreos, así como sus alcances y potenciales para promover la economía circular y crecimiento del PIB. La investigación incluye aspectos de prevención y remediación de daños ambientales resultado de la explotación de los materiales áridos y pétreos, y finalmente identifica aquellas iniciativas nacionales y las potenciales sinergias desde los GAD para la promoción de la economía circular.