Abstract:
OBJETIVO: Establecer si la edad materna mayor de 35 años (añosa), se comporta como factor de riesgo independiente para resultados obstétricos y perinatales desfavorables. METODOLOGÍA: Se realizó un estudio de cohorte para el cual se utilizó la información almacenada en las historias clínicas y base de datos de la Unidad Metropolitana de Salud Sur. Se incluyó la totalidad de los partos en mujeres mayores de 35 años registrados entre enero de 2013 y diciembre de 2013. El Total partos en pacientes añosas fue de 350, de los cuales al aplicarse los criterios de exclusión me permitieron tener una muestra de 315 madres añosas. Para la Cohorte de mujeres entre 20 y 34 años de recolectaron los datos de 210 partos atendidos en mujeres de este grupo etario en la Unidad Metropolitana de Salud Sur de enero a diciembre del 2013. Los datos fueron analizados con los programas estadísticos EPI INFO y SPSS. RESULTADOS: En la Unidad Metropolitana de Salud Sur durante el año 2013 se atendieron 2743 nacimientos, esto entre partos vaginales y partos por cesáreas; de estos EL 12.7% se produjeron en mujeres mayores de 35 años. La edad promedio de las participantes de este estudio fue de 33.6 años. Siendo la edad mínima 20 años y la edad máxima 44 años. Más de la mitad de las pacientes (64,3%) tienen algún problema de sobrepeso u obesidad, lo que a su vez actúa como factor de riesgo para otras patologías. la variable paridad se encontró que el 60,6% de las pacientes tiene más de 2 hijos y es clasificada como multípara, y se encuentran predominantemente en la cohorte Al realizar el cruce de variables para la estimación de riesgos por ser madre añosa no se encontró una relación significativa entre la edad de las pacientes y el riesgo de Hospitalización durante el embarazo, el diagnóstico de diabetes gestacional, la presencia de ruptura prematura de membranas, y presentaciones anómalas durante la labor de parto. Sin embargo, los Odds ratio que se encontraron significativos demuestran asociación entre ser madre no añosa y presentar mayor número de controles prenatales, y ser madre añosa con mayor riesgo de hemorragia postparto, hemorragia durante el tercer trimestre del embarazo y el diagnóstico de compromiso de bienestar fetal durante la labor de parto. CONCLUSIONES: La hipótesis planteada se comprobó a medias, pues se encontró relación significativa entre la edad materna y la presencia de comorbilidades durante el embarazo como fueron los trastornos hipertensivos del embarazo, y el riesgo de sangrado, sin embargo, no se determinó mayor riesgo de presentar diabetes gestacional como se hubiese esperado. No se logró establecer mayor riesgo para la necesidad de hospitalización durante el transcurso del embarazo para el grupo de añosas. No se determinó mayor riesgo para los recién nacidos las únicas variables con las que se determinó asociación al ser madres mayores de 35 años fueron puntajes de Apgar menor a 3 y mayor riesgo de presentar recién nacidos con peso bajo al nacimiento, no se encontró mayor riesgo de presentar recién nacidos prematuros al momento del parto, pese a estos hallazgos el resultado perinatal de los hijos de madres añosas es favorable, no se logró determinar.