Abstract:
Durante la Ilustración, Boullée ya criticaba la visión vitruviana de ver a la arquitectura como el arte de construir. Para él existía un paso previo: antes de construir hay que concebir. La creación arquitectónica es la consecuencia de una crítica poética o proyectual. Así, la meta de la crítica siempre es la propuesta de nuevas ideas. De dicha manera evoluciona la disciplina. Las ideas son representadas a través de la utopía, y estas son las que cambian al mundo y no la limitada y dogmática realidad. Miremos los «Disparates» de Goya, o la realidad esencial no figurativa que nos querían trasmitir los artistas del Cubismo. El dibujo es un medio para expresar ideas muy sugerentes que pueden llevar a la arquitectura a un estado filosófico y teórico más propositivo. Ejemplo de ello han sido Piranesi con sus «Cárceles», Boullée con su «Cenotafio de Newton», Sant’Elia con su « Città Nuova», Chernikov con sus «Architectural fantasies». Sin dejar de nombrar a Taut, Archigram o Woods. Son todos ellos grandes visionarios que no necesitaron construir para dar grandes aportes a la arquitectura. Ellos necesitaron concebir y su medio fue el dibujo. Un dibujo puede explicar toda una filosofía de pensamiento en muy pocos trazos.